Estimados miembros,
Queridos amigos,
En estos tiempos tan complejos que estamos viviendo en diferentes partes del mundo, deseo expresar mi solidaridad con todos los miembros de la ACI, y en particular con todos aquellos que están pasando por momentos de gran dificultad.
La emergencia en la que nos encontramos y las medidas promulgadas por las autoridades nacionales para evitar la propagación de Covid-19 representan un gran desafío para nuestras sociedades y para las cooperativas, que juegan un papel tan importante en ellas.
Por el bien de nuestras comunidades, debemos demostrar inteligencia y poner en valor nuestra trayectoria y nuestra concepción solidaria de la salud y en todos los demás ámbitos para enfrentar estos desafíos.
Muchas cooperativas ya han reorganizado su forma de trabajar. Las oficinas de la ACI también lo han hecho. Quiero agradecer los esfuerzos que todos están realizando dentro de sus respectivas organizaciones.
Estamos adaptando nuestras acciones de acuerdo con las disposiciones prescritas por las autoridades competentes para contribuir de la mejor manera posible a la protección de todas las personas, como siempre lo hemos hecho.
En el movimiento cooperativo, sabemos que «la experiencia del otro» basada en valores como el respeto, la escucha, la aceptación, la empatía, la ayuda mutua, la buena voluntad, la responsabilidad, la solidaridad, la responsabilidad ciudadanía, entre otros, es algo fundamental.
En situaciones de crisis, las cooperativas siempre han estado a la vanguardia con lucidez, audacia y determinación. Hoy, gracias a su inherente solidaridad, unidad y espíritu pionero, continúan generando ideas poderosas para el beneficio de todos.
Sigamos comunicándonos, compartiendo información relevante, apelando a la responsabilidad de nuestras empresas cooperativas y poniendo nuestros principios y valores en acción.
Les deseo toda la fuerza para enfrentar estos duros momentos y los aliento a seguir proponiendo respuestas solidarias en cada una de nuestras comunidades.